Un vino joven, frutal, fresco y muy fácil de tomar, muy versátil, para asados bien argentinos, un mediodía de verano.
Representan la esencia de la cultura argentina.
Manifiestan un color profundo y una expresión aromática única.
Fermentación del 30%, por 6 meses en barricas de roble francés y americano.
De color rojo con reflejos violetas, límpido y brillante.
Intensidad media con notas frutales, cereza, ciruelas negras y moras negras.
Su paso por madera americana aporta vainilla con notas suaves a tostado.
Entrada dulce, con taninos redondos y buena acidez, de persistencia media, con un final de boca frutado.
Maipú, Mendoza. Argentina.