La belleza de la composición en Don Melchor es entrelazar los sabores, aromas y las emociones que producen las diferentes parcelas de Cabernet Sauvignon.
Es unir, en una forma equilibrada, cada expresión de las parcelas. Es encontrar el equilibrio que permite la expresión de un lugar, de un suelo, de la cordillera de los Andes en un solo vino.
CRIANZA / BARRICADO:
Los racimos se cosechan a mano en gamelas de 10 kilos. En la
bodega, se seleccionan racimos y bayas antes de la vinificación.
La fermentación alcohólica en tanques de acero inoxidable dura
9 días a 25-26°C, con 3 remontajes diarios, reduciéndolos luego.
Tras la fermentación, el tanque se sella para una maceración de
una semana a 23-25°C, logrando taninos más suaves. Cada tanque
es degustado y seleccionado por el equipo enológico, y el vino se
envía a barricas de roble francés para fermentación maloláctica y
crianza. En julio, los vinos se mezclan y vuelven a barricas antes
de embotellar.
CATA:
De color violáceo profundo, con una gran intensidad y
complejidad aromática de frutos rojos acompañados por
notas florales de violetas y rosas. En la boca es un vino
sabroso, con un ataque suave, para luego mostrar una
gran frescura, junto con la elegancia y potencia
característica de Puente Alto. Se trata de un vino de
textura aterciopelada, cuerpo exuberante, y un final muy
largo y persistente.